En octubre de 1972, Julie Alvira comenzó como secretaria en Esteve International, que se convirtió en Bella International en 1982. Además de su trabajo, participaba en labores sociales y religiosas. Al momento de su muerte el 7 de julio de 2012, era Gerente de Operaciones de AutoGrupo PR. Sus compañeros apreciaban su labor social, aunque no comprendían completamente su alcance, ya que ella lo hacía de manera discreta.

Una de las características de Julie era su frugalidad, donando gran parte de su sueldo a personas necesitadas. Cuando Julie muere, algunos de sus compañeros de trabajo estuvieron de acuerdo que el legado de ella no podía desaparecer con su muerte y decidieron crear la “Fundación Julie Alvira” para continuar su obra de ayudar económicamente como ella hacía a los necesitados sin importar su raza, credo o condición social.

Con este objetivo, se comienza a trabajar en la recaudación de fondos suficientes para, no solo apoyar a las organizaciones preferidas por ella, sino también colaborar con otras instituciones que realicen una labor destacada en ayuda a los más necesitados, y ofrecer apoyo a personas particulares en situación de necesidad, de la misma manera en que ella lo hizo con su salario.